"Perdone, me molesta el humo"

Amigos, nos venden humo. Allá donde vayamos nos engañan de un modo u otro. No es que todo el mundo quiera lo peor para nosotros o que nos persigan para complicarnos la vida, pero deberíamos desconfiar de la bondad humana. Plauto decía, hace 2200 años: "Lupus est homo homini, non homo, quom qualis sit non novit” (Lobo es el hombre para el hombre, y no hombre, cuando desconoce quién es el otro). Thomas Hobbes, en el siglo XVII, resumía esto en "Homo homini lupus" (El hombre es un lobo para el hombre).
Vivimos en democracia y gozamos de unos derechos y libertades que nos permiten tener una vida más o menos cómoda. Hasta ahí todos de acuerdo. Pero. ¿qué pasa con la separación de poderes?, ¿está siendo democrática la política?...
España comparte problemas con todos los países occidentales: el agotamiento de las ideologías, la confusión entre tolerancia e indiferencia, o entre multiculturalismo y relativismo. Además está atravesando una dura crisis económica (estoy seguro de que si ha aparecido la crisis es porque alguien no ha cumplido estrictamente los princpios democrácticos y ha preferido la "ley del embudo"). Por otro lado, la política tampoco nos ofrece la mejor de las caras para confiar en ella.
En democracia las reglas del juego son muy sencillas: yo voto al partido X porque tengo confianza en que puedan hacer algo que me interesa y le puede venir bien a mi país (¿no es así?). Pues bien, ¿qué confianza se puede esperar de unos partidos que se espían entre sus miembros, con chanchullos y críticas, mirando cada uno su ombligo y no las necesidades de quienes los votaron? Cero. No existe la solidaridad, y una democracia sin solidaridad no es nada más que humo.
Y hay muchas cosas más que atentan contra la democracia: el Congreso nombra a los miembros del Consejo General del Poder Judicial; las Comunidades Autónomas no trabajan en solidaridad (como apunta la Constitución), cada una mira por sus intereses...
Con tantas cosas las que se podrían mejorar...El caso es que nosotros podríamos elegir una mejor opción cada 4 años, esperando que cambie la cosa. Pero no. Resulta que en campaña (que la pagamos todos, dígame si eso es democrático) nos prometen paraísos y tiempos mejores y, a la larga (o al menos hasta ahora), son tiempos de crisis con políticos que crean sus paraísos fiscales. Todo envuelto en una gran nube de tizne y desinformación.
Amigos, el tabaco mata, pero es peor el humo de quienes no buscan la solidaridad y solo miran su interés. Yo, qué quieren que les diga, estoy malhumorado y sin tabaco.

A.López Gil